Gracias, Aceleración 2, por un año inolvidable

 

Un ciclo que termina, pero deja huellas imborrables en el corazón

“Aceleración 2, un grupo que aprendió con el corazón y dejó huellas de amor y respeto.”

Hoy cerramos un nuevo capítulo lleno de aprendizajes, retos superados y momentos compartidos. Ha sido un año en el que cada uno de ustedes, queridos estudiantes de Aceleración 2, demostró que el respeto, el esfuerzo y el compromiso son las verdaderas claves del éxito.

Agradezco profundamente a Dios por haberme permitido acompañarlos en este camino; por poner en mi vida a niños y niñas maravillosos que, con su alegría, dedicación y cariño, llenaron cada jornada de armonía y motivación.

Verlos crecer, aprender y avanzar ha sido una experiencia gratificante que deja en mí una gran enseñanza: cuando se trabaja con amor, los resultados van más allá de las notas, se reflejan en la sonrisa, en la unión y en los valores que compartimos día a día.

Hoy no es una despedida, sino un “hasta pronto” lleno de gratitud y esperanza. Sigan soñando, esforzándose y creyendo en todo lo que son capaces de lograr, porque cada uno de ustedes tiene un brillo especial que los llevará muy lejos.